Roger
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 | | Tema: Roger Romet Mar Feb 12, 2019 12:17 pm | |
| Nombre / Alias: Roger
Apellido: RometEdad: 27 Años Nacionalidad : Americano - Japonesa Raza: Humano Profesión: Analista de datos para el gobierno. / Hacker en la vida clandestina. Categoría: Imperialista Personalidad:Carismático; es el nombre del batido que, tras prueba y error, ha perfeccionado para mezclarse entre la gente. Turbia combinación de payaso, liderazgo, algo de astucia, muchos trucos bajo las mangas y ingentes cantidades de una sonrisa patentada y desvergonzada. Testarudo y paciente. Disfruta metiéndose en líos, autodenominado “aventurero de la vida”. Por lo demás es una persona sencilla, le gustan los pequeños lujos y el sexo. Planea hacerse con el mundo algún día, como la mayoría, pero por ahora, se ha estancado en las bases de su plan. Habilidades Y Debilidades: Ser mortal es la más evidente de sus debilidades. ¿Para quién no? Sangra cada vez que le pinchan o le cortan, y lo que es peor, envejece. No, no es por las arrugas, es porque algún día su pene ya no se alzará vigoroso, hermoso y duro. Se marchitará y parecerá una pequeña y lánguida judía verde.
Padece un defecto desde su nacimiento: hace explotar la cocina cada vez que intenta preparar algo comestible. Si lo que quieres es envenenar a alguien, ¡ya tienes a tu hombre!
En sus habilidades, constan el hackeo, los números y su inteligencia. Hay que estar orgulloso de lo que se tiene. Posee unas manos inquietas (y transgresoras), y el placer de encandilar con su sola sonrisa.
A la lista hay que añadir la increíble habilidad inútil que tiene por cabrear a la IA (inteligencia artificial) que él mismo ha creado. Algunos desajustes de su armario, (como lo suéters rosa) han sido víctimas de éste rifi-rafe tan peculiar.
Si preguntas por habilidades secretas, el violín es la clave.
Historia: - Madre:
Madre,
El recuerdo que tengo de ti se ha disipado, pixelado por el tiempo y el rencor. Me he quedado a solas con la percepción de ti como una chiquilla asustada y desprovista de recursos. Naciste en la pobreza y jamás tuviste fuerzas para escalar fuera de ese vertedero. Aún ahora no entiendo por qué pusiste tanto empeño en tus berridos y berrinches en lugar de tomar armas en el asunto. Te recuerdo que tú escogiste casarte con el desgraciado que creías merecer. El resto: prostitución – excusas, sin estudios – excusas, tu propio hijo – excusas.
Mi infancia no fue diferente a la tuya; ignorado por mi madre, apallizado por mi padre y casi siempre en la calle. Aprendí a robar y a pelear, pero también a adquirir aliados y a apartarme de los enemigos que no podía vencer. Estudié, ¿acaso te diste cuenta de las matrículas y los premios deportivos?
Cuando el maldito de tu marido al fin se fue a la cárcel, seguí alimentando y vistiéndonos. Nuestro mundo seguía aferrándome con cadenas y engaños, así que fingí ser el bueno, el malo y quizá hasta el feo. ¿Dónde estabas tú en todo esto?
Estoy estancado, Madre, atrapado por tu culpa. Exprimiste todo el amor que pude llegar a sentir por ti y lo transformaste en odio, en rencor y en dolor. Incluso en esto somos diferentes; yo soy capaz de admitir mis debilidades.
Hace tiempo me preguntaron sobre el cómo y el cuándo de mi sexualidad. Ríete, pero ¿sabes lo que pensé? “Decidí ser gay cuando mi madre me violó a los quince años. Nunca sentí tanto asco hacia las mujeres.” Claro que ese tipo de cosas no funcionan así, pero sería un perfecto cuento de terror.
Yo he hablado de lo que sentí hacia ti, sin embargo, ¿qué debiste sentir tú hacia mi? ¿Me dedicaste un pensamiento mientras yacías en tu cama, muriéndote? ¿Te sentiste orgullosa o decepcionada de mi? ¿Imaginaste que tendría amigos? ¿Deseaste que viviera una vida feliz? Creo que no. Que todo lo que jamás pasó por tu cabeza iba sobre ti. Eras la imagen viviente del egoísmo.
Y entre tanta maldad, no pude separarme de tu lado. Te sostuve la mano hasta el último de tus exhalaciones. Te enterré y te lloré.
Ahora déjame ser libre de tu maldición. Por favor. Por favor. Sigo atrapado, Madre, por tu maldad.
- Padre:
Grandísimo hijo de puta.
Solo quiero restregarte que fui yo quien te mandó al infierno. Debería haberlo hecho muchísimo antes, pero fuiste lo bastante listo para dejarte encarcelar y que te protegieran de mi deseo asesino.
¡Ja! La paciencia dio sus frutos.
El cuchillo con el que te rajé la garganta se empapó de tu sangre, pero seguía ardiendo como fuego en mi mano. Pocas veces he visitado ese cielo como aquella noche.
Entre las palizas y el alcohol, eso fue lo que sembraste. Un hijo que se convirtió el parricida.
No me arrepiento ni una pizca.
Nos veremos en el infierno.
- Kieth:
Te amé desde nuestro primer encuentro. Cada segundo de los cuatro años pasados a tu lado como amigo. Te amé incluso cuando exploté, lleno de celos y de rabia. Pero me olvidé del amor mientras te violaba, destrozándolo en mi interior. Lo convertí en culpa, arrepentimiento y en todas y cada una de las pesadillas que me han seguido desde entonces.
Me convertí en un monstruo, en mi padre.
Te escapaste de entre mis manos, de mi vida, antes de que pudiera pedirte perdón. Remediarlo de alguna forma. ¿Pero acaso la traición se puede perdonar?
Quiero olvidarte. Olvidar que lo hice. Pero ahí estás, cada vez que cierro los ojos y me doy cuenta de que sigo respirando.
Perdóname.
(Perdóname por dejar de amarte).
- Sullivan, o Sully, es el único amigo de la infancia que ha sobrevivido a los años. Es una rata escurridiza escondida en su refugio de paradero desconocido. Hábil hacker que le ha ayudado tantas veces como lo ha dejado tirado. Amante de los pechos grandes y las pajas. No se ven las caras desde que Roger ingresó en la universidad, pero la lealtad entre dos desafortunados sigue existiendo.
- Pluto es una Inteligencia Artificial que R consiguió crear hace unos cinco años. Enfundado en una especie de platillo volador, es su mano derecha. Ahora, tras años como servicio doméstico, limpiando y cocinando para él, Pluto se ha revelado como un aprendiz de cómico y ha revindicado su derecho a tener un aspecto más útil.
- Tiene un Husky llamado Fenris que es más inteligente que su amo.
- Ama el sexo pero odia los condones con sabor banana.
- Ganó una beca de deportes para poder estudiar administración empresarial gracias a su talento en el atletismo. Hoy en día, sigue saliendo a correr cada mañana pase lo mucho que odia madrugar.
Registro de PB: Original (no recuerdo al autor)
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